¿Que es OCASO?
El proyecto OCASO, aprobado por el programa europeo de cooperación transnacional Interreg V-A España – Portugal (POCTEP) 2014-2020, pretende provocar un salto cuantitativo y cualitativo en cuanto al conocimiento científico que se tiene de determinados procesos marinos y fomentar el desarrollo de la Economía Azul en el suroeste de la Península Ibérica son dos de los objetivos del proyecto europeo OCASO, coordinado desde la Universidad de Cádiz, esta iniciativa centra sus esfuerzos en crear un Observatorio Costero Ambiental del Suroeste de la Península Ibérica, se trata de desarrollar un sistema observación oceanográfico, similar al meteorológico, que ofrezca información a los usuarios sobre el comportamiento de los diferentes procesos marinos que ocurren en las costas de Alentejo y Algarve (Portugal) así como en Andalucía.
El proyecto cuenta con un presupuesto total que asciende casi a un millón de euros, cuenta con un consorcio donde, además de la Universidad de Cádiz, participan Puertos del Estado, la Universidad de Algarve, el Instituto Hidrográfico IHPT y el Instituto Español de Oceanografía (IEO), entidades que buscan potenciar la investigación, el desarrollo tecnológico y la innovación en esta área.
El Observatorio ha sido ideado como una plataforma integrada, sostenible y dinámica, que beneficiará al tejido socioeconómico local, así como a administraciones y empresas, especialmente a aquellas que se dediquen al sector ambiental ya que podrán contar con información que les ayude en la toma de decisiones. De hecho, es importante destacar que una de las novedades de esta iniciativa se centra en que los propios usuarios del Observatorio podrán participar activamente en la definición de las características de la información, lo que da a esta innovadora herramienta el papel de conector entre los usuarios finales y las iniciativas europeas de Observación del Medio Marino.
Para poder llevar a cabo esta iniciativa, el primer paso es potenciar aquellas estructuras de observación meteo-oceanográficas que ya existan, además de desarrollar y adaptar los modelos hidrodinámicos y atmosféricos que se encuentren disponibles. Asimismo, habrá que gestionar los datos de manera que se cree una homogeneización de los protocolos y, en último lugar, identificar a los posibles grupos de usuarios y cuáles son sus necesidades.